¿Qué es la musaka?
Es una lasaña, en la que se sustituyen las hojas de pasta, por rodajas de berenjena.
No es una receta complicada pero es laboriosa, puesto que conlleva varias preparaciones, que son las que detallo a continuación.
_Primero: procesamiento de las berenjenas, que conformarán, la base del plato.
_Segundo: Hacer el relleno.
_Tercero: Hacer la bechamel
_Cuarto: Montar y hornear.
En esta receta, tanto los ingredientes como las cantidades, son algo orientativo; sólo hay que respetar, las proporciones de la bechamel.
INGREDIENTES (8 raciones):
PARA LA BASE:
_ Berenjenas 1,2 kgs (3 unidades)
_ Aceite de oliva virgen extra
_ Sal
PARA EL RELLENO:
_ Aceite de oliva virgen extra
_ Cebolla dulce 300 grs
_ Zanahoria 200 grs
_ Champiñones 250 grs
_ Ajo 2 dientes
_ Carne picada de ternera 800 grs
_ Tomate frito 700 grs
_ Laurel
_ Sal
_ Brandy
PARA LA BECHAMEL:
_ Mantequilla 50 grs
_ Harina 48 grs
_ Leche 800 mlt
_ Sal
_ Pimienta negra molida
_ Nuez moscada rallada
PARA EL MONTAJE:
_ Queso mozarela rallado
ELABORACIÓN:
Lo primero que vamos a hacer, es preparar la base.
Cortamos las berenjenas, en rodajas de medio centímetro de grosor.
Les añadimos sal, por las 2 caras y las colocamos en un plato, para que suden; es decir, la sal que les hemos añadido, hará que las berenjenas expulsen agua.
Las dejamos reposando, unos 45 minutos aproximadamente.
Mientras que tenemos las berenjenas sudando, vamos a hacer el relleno.
Lavamos y pelamos todas las verduras y las cortamos en trozos pequeños.
Ponemos una sartén al fuego medio/fuerte (7), con un chorro de aceite y añadimos las verduras y el laurel.
Vamos removiendo con cierta frecuencia, para que no se nos pegue.
Al principio, la verdura soltará líquido, pero transcurridos algunos minutos, empezará a dorarse.
Una vez, que la verdura haya cogido color, añadimos la carne picada y seguimos removiendo, hasta que la carne se dore un poco.
En ese momento, añadimos un chorro de brandy y seguimos removiendo, hasta que deje de oler a alcohol.
Bajamos el fuego, a fuego medio/bajo (4); añadimos el tomate frito y dejamos que se cocine todo junto, durante unos 3 o 4 minutos.
Añadimos sal y probamos. Rectificamos de sal o incluso de azúcar, si fuera necesario.
El relleno ya está terminado.
En el rato que hemos tardado en hacer el relleno, las berenjenas ya habrán sudado lo suficiente.
Cogemos todas y cada una de las rodajas de berenjena y las secamos con papel de cocina.
Ponemos unas cuantas rodajas de berenjena, ya secas, sobre un plato y con la ayuda de una brocha las pintamos con aceite, por las 2 caras.
Ponemos una sartén a fuego medio/fuerte (6/7) sin nada de aceite y cuándo coja temperatura, ponemos las rodajas de berenjena en la sartén.
Las tenemos unos tres minutos, por cada lado, hasta que se doren un poco.
No es necesario que se cocinen del todo; sólo hay que marcarlas.
Una vez que saquemos las berenjenas de la sartén, las ponemos en un plato, con papel de cocina, para que suelten el exceso de aceite.
Seguimos haciendo tandas, hasta que hayamos marcado todas las berenjenas.
Una vez que hayamos terminado, las reservamos.
Ahora, vamos con la última preparación; la bechamel.
Lo primero que hay que hacer, es calentar la leche. La puedes calentar en un cazo o en el microondas, lo importante es que esté muy caliente.
Por otro lado, en una olla a fuego medio(4/5), echamos la mantequilla y removemos hasta que se derrita. A continuación, añadimos el harina y seguimos removiendo (1 minuto aproximadamente) , hasta que formemos un roux sin grumos.
NOTA : Un roux, es una mezcla a partes iguales, de harina y grasa.
Echamos un chorro de leche caliente al roux, removemos bien con las varillas, hasta que se mezcle todo bien. Seguimos añadiendo leche y removiendo, hasta que hayamos echado toda la leche.
Una vez que esté toda la leche en la cazuela, subimos el fuego (6/7) y seguimos moviendo con las varillas, hasta que hierva un poco. En ese momento, apagamos el fuego.
Le añadimos sal, pimienta y nuez moscada. Probamos y si está a nuestro gusto, reservamos.
Ya sólo nos queda, montar el plato.
Pintamos una bandeja de horno, con un pelín de aceite y ponemos una base de berenjenas.
Añadimos la mitad del relleno, lo extendemos bien sobre la base y echamos un poco de bechamel, por encima.
Encima de lo anterior, ponemos otra capa de berenjenas, la otra mitad del relleno y otro chorrito de bechamel. Para terminar, ponemos una última capa de berenjenas; lo cubrimos todo con bechamel y echamos queso rallado por encima.
Ya sólo queda, meter la musaka en el horno.
Precalentamos el horno a 200°C, con calor arriba y abajo y sin aire.
Metemos la musaka 30 minutos.
Sacamos la musaka y nos la comemos.
Si te sobra, la puedes congelar, sin ningún problema.
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